La nieve me espera...

Sí, la nieve me espera a que salga a la calle para empezar a caer. Esta mañana, al levantarme, no nevaba, y no ha nevado en toda la noche. En el momento en el que me dispongo a salir hacia clase, se pone a nevar…subo al autobús y deja de nevar…me bajo de él y empieza otra vez…llego a clase y deja de nuevo de nevar… (lo prometo, ha sido exagerado)… Cuando he llegado a casa para comer, ha dejado de nevar, y así ha estado toda la tarde…hasta que a las 7 me voy a la piscina y cuando me acabo de meter en un hottur pottur (piscina calentita, a 38 grados, mmmmm…), empieza a nevar de nuevo…Y cómo no, ha sido llegar a casa y no ha vuelto a caer un copo…

Ufff! La piscina te deja molido, es tal la relajación que creía que no llegaba a casa, encima andando por la nieve (mi barrio no tiene calefacción en la aceras, como tienen en el centro).

Ayer fui al registro civil, para dejar constancia de mi nueva dirección, pues todavía aparecía que residía en Hoffstadir, la granja, y me iban a mandar allí las cartas del banco y todo eso. Pues  me presento allí y resulta que es una oficina enana, con UNA sola persona para atender. Claro, no hace falta más, porque no había nadie más que yo. Le digo lo que quiero a la chica, me da un papel mmmuy sencillo de rellenar, se lo entrego, lo coge, mete los datos en un ordenador y me dice que ya está… ¿Habéis ido al registro civil en Cartagena? Pues no digo nada más…

A la vuelta a casa, decidí darme un paseo en lugar de coger el bus, pues no estaba muy lejos, y cuando doblo una esquina, me encuentro con una bandada de patos en medio de la calle, picoteando un césped…Pero unos pedazo de patos que cada uno debía pesar por lo menos 15 kilos… Y allí estaban, en medio de la ciudad, tan frescos, haciendo una visita a un jugoso césped…Paso por al lado, me miran, ven que no llevo malas intenciones, y siguen a lo suyo…cuac, cuac!!!

También hay unos cuervos enormes en la ciudad. A veces pasan por delante de mi ventanal, y me pegan unos sustos que no veas…

En clase todo va muy bien. La profesora es una pellejuda (= señora mayor), muy simpática, pero casi me divierto más observando a mis compañeros. Lo cierto es que se cumplen todos los tópicos sobre las nacionalidades, menos con la sueca:

 Hay dos chinas (o algo así), que no hablan con nadie, sólo entre ellas, y eso que no se conocían. Cuando llega la pausa para el café, ellas se quedan en la clase, sentaditas, esperando que empiece otra vez. Hay una lituana que tiene una cara de rusa (o de lituana) que no puede con ella, se le ve a kilómetrrrrros (es así como habla), y es seria y va vestida con una chaqueta con hombrrrreras, por lo que parece una generala. Hay un chico indio que no levanta dos palmos del suelo, y sonríe constantemente, y no entiende nada nunca. Si la profesora le pregunta cualquier cosa, sólo sonríe mucho mucho y asiente con la cabeza…la profe está desesperada con él… Hay una argentina, que se ha hecho amiga mía (claro), que no para de hablaaaaar, preguntaaaar y analisaaaar todo lo que dice la profesora. Siempre pregunta en qué contextos se dice cada cosa que nos enseña. Imagínate a la profesora cuando le preguntó en qué contexto se dice “hola” o “buenos días”…no sabía qué responderle…Hay un danés que mide dos metros, muy delgado, rubio, con los pelos despeinados a conciencia y unas gafitas de pasta, redondas y pequeñas. Éste se ha juntado con un polaco de su misma edad (más o menos la mía), que va rapado, y que tiene una cara de polaco…no lo puede negar. Ambos se sientan al final de la clase, y deben pasárselo muy bien, pues se ríen mucho. El polaco es exageradamente tímido con todo el mundo, mientras que el danés va sobrado, y a veces hasta resuelve las dudas de algún compañero. Está muy orgulloso de que el idioma danés se parezca un poco al islandés, y demuestra su superioridad en este sentido. También hay un irlandés, cómo no, pelirrojo, gordito, con gafas, que habla mucho, y no deja de meterse con los ingleses invasores (yo no sé la de veces que nos ha contado que estuvieron siglos bajo dominación británica…es un rollo de tío ya, siempre con lo mismo…).  Y había una brasileña que, gracias al cielo, sólo vino el primer día de clase, y no ha vuelto. Se sentó a mi lado y se pasó toooda la clase tarareando, y no me dejaba escuchar a la profesora…venga a canturrear…no paraba la tía, qué pesada, no se puede dejar la samba ni en clase, ni en Islandia. Espero que, si vuelve, no se siente más conmigo. Y por último, está la sueca, que es la única que no cumple los tópicos. Es sueca pero es bajita, mucho, y regordeta, y es lo más tímido que he conocido nunca. Cuando la profesora le habla, pega la cabeza a la pared y responde con susurros. Ayer casi se echó a llorar porque la profe le decía que repitiese la respuesta más alto, para que la oyéramos los demás, pero no había manera…cada vez se escurría más y más en su silla, y yo pensaba que de un momento a otro iba a romper a llorar, la pobre. Como le hago caso, se me ha pegado, y se viene conmigo y con la argentina a tomar el café, y claro, tenemos que hablar en inglés para que se entere…y es un cachondeo, porque estamos Susana y yo hablando en inglés, pudiendo hablar en castellano, pero Daniela, la sueca, no suelta prenda, por lo que creo que le daría lo mismo si habláramos en nuestro idioma. Se queda mirando al suelo pegada a nosotras, sin decir nada…

Como una misma a sí misma no se ve, pues no sé hasta qué punto yo cumplo con los tópicos españoles, pero creo que hablo muy alto, para empezar...  :P

Bueno, ya llevo una semana aquí y me encuentro muy bien, sólo me falta encontrar un trabajo. Ayer envié mi currículum a varias leikskóli (guarderías), que tienen puestos vacantes, pero como no hablo islandés, no sé si me cogerán… Ayyyy, yo quiero trabajar ahí, es lo mejor…!!!

 

Bueno, lo de hoy ha sido un buen rollo y no lo del quijote (que a todo esto, aquí llaman Don Kikote, jajajja…). Vale doble, por lo de ayer y lo de hoy.

 ¡Un beso a todos!