¡Las piscinas son lo mejor que hay!

Pues me he sacado un bono para la piscina, de 10 viajes, y así me sale mucho más barato, a 200 pesetas el viaje, en lugar de 380 si lo pagas de uno en uno...

Lo de las piscinas no tiene nombre...Da igual el tiempo que haga, que llueva, nieve o caigan rayos, que ésta gente sigue yendo. Claro, si tienen que esperar a que haga bueno, no irían nunca. Además, éstas piscinas no son para refrescarse, como las nuestras, sino para calentarse, por lo que cuanto más frío hace, mejor te quedas después...

Lo primero que haces es quedarte en pelota picada (en el vestuario femenino, claro) y pegarte una ducha con jabón, por todo el cuerpo, pelo incluido, (es obligatorio, y además, hay unos carteles explicativos muy graciosos, donde te dicen en qué partes del cuerpo tienes que insistir con el jabón...imaginaos qué partes son...jejej...: la sobaquera, los pies, y tus partes...). Después te pones el bañador y....¡dios!... ahora viene lo peoooor!!! Tienes que salir al aire libre completamente mojada, chorreando, y correr y correr hasta que llegas a una de las piscinas calentitas, que a veces no están nada cerca de la salida de los vestuarios. Éstas carreras son peligrosas, pues en el suelo puede haber placas de hielo, por lo que corres, pero a medias, como un pato...durante estos segundos, te planteas quién coño (con perdón) te ha mandado a tí meterte en esto...pero se te olvida en el momento en el que te sumerges en el hottur pottur...y se te abre el cielo...

Es curioso cómo, cuando llevas un rato ahí metido, sentado tan a gusto, te entra muuucho calor, y unas ganas locas de salirte y que te dé el fresco, revolcarte por la nieve (a eso no he llegado aún, jejeje) o meterte en una de las piscinas más frías...es una sensación grandiosa, como si apagaras un fuego...Pero claro, en un minuto te tienes que meter en la caliente otra vez, y así todo el rato...hasta aque al final notas que no tienes fuerzas ni para llegar al vestuario...imagínate, te tienes que duchar, vestirte, secarte el pelo y tirar para casa, andando sobre la nieve...Pero ya no tienes frío en varias horas, se te mete el calor en lo huesos...es genial...!

Lo de los vestuarios está muy bien pensado: nada más entrar desde la piscina, están las duchas y unas lejas donde has dejado antes la toalla. Para pasar a la parte de las taquillas, te tienes que secar completamente. Para vigilar esto, hay una mujer metida en una habitación que tiene una cristalera que da a la zona de secado...(vaya trabajo más aburrido...sólo observa y observa a las tías secándose...bueno a lo mejor para otros no sería tan aburrido, jajajaj!!!). Te secas y centrifugas el bañador en una máquina para que no chorree (eso es un buen invento). Te vistes y sales al pasillo, donde has dejado tus zapatos en una leja...y te vas para casa como puedas, aunque la sensación es que vas flotando...

Si ves a alguien correr much mucho, es que no es islandés...ellos se salen de las piscinas y se tumban al aire o se ponen a charlar como si nada...¡y van mojados, a 0, 1 ó 2 grados de temperatura, o menos! Al principio echan humo, pero son capaces de quedarse fuera mucho tiempo. Y no digamos los niños, que están más tiempo fuera que dentro del agua...y los padres tan panchos...y no se ponen malos...! Ayer, como estaba todo nevado, el juego de los críos era ir a coger el pedazo de nieve más grande y tirárselo entre ellos...y para coger más cantidad de nieve, hacían una bola enorme en el suelo y la cogían abrazándola, y a correr detrás de otro niño...increíbe... Yo creo que no tienen termostato...

Ayer había un hombre que se salió de la piscina y se puso a hacer footing alrededor de ella. Se pegó por lo menos 20 minutos...me daba cosa verlo...mojado, en bañador, con 1 grado de temperatura que hacía...

Yo es que creo que no tienen termostato ni sentido de la temperatura, porque lo mismo hacen eso que se meten en los hottur pottur más calientes, donde yo no soporto meter ni el pie...a 44 grados de temperatura, yo creo que las proteínas se desnaturalizan y todo...y se pegan ahí horas y horas...cociéndose vivos, literalmente...

Creo que con esto queda bastante explicado cómo funcionan las piscinas en Islandia, que son toda una institución, un lugar de reunión social, como si fueran nuestros bares.